Se está violando obscenamente la Constitución.
El presidente se arroga la suma del poder público.
Es un verdadero golpe institucional y un liberticidio elaborado por 10 corporaciones económicas y ejecutado por un señor desequilibrado que pretende gobernar fuera de la ley como un monarca absoluto manejado por rasputines forajidos.
Todos los partidos políticos de la democracia y organizaciones de la sociedad civil debemos constituir una coordinación contra el Decreto Infame que de prosperar será un golpe irreparable contra los derechos y libertades esenciales establecidos por la Carta Magna de la Nación Argentina.