LA PLATA (Corresponsalía Buenos Aires) Todas las tribus bonaerenses del Frente de Todos ven bien el plan B a la suspensión de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) que puso sobre la mesa Máximo Kirchner (el Plan MK), que consiste en atrasar la competencia para acortar los tiempos entre esa elección y la general; una iniciativa que también apoyaría preventivamente la Casa Rosada. Aunque hay sectores que insisten con la suspensión, reconocen eso está prácticamente descartado debido a la falta de consenso interno y la férrea oposición de Juntos por el Cambio. En ese escenario, hay coincidencia en el frentetodismo sobre la conveniencia del retraso por dos motivos centrales: aporta más tiempo para mostrar eventuales mejoras en la economía y achica el margen para que entre una y otra compulsa electoral la oposición pueda fortalecerse, como ocurrió en 2019.
Aunque no hay una respuesta contundente, en línea con la postura del gobernador Axel Kicillof de mantenerse al margen -al menos en la discusión pública- respecto de la estrategia electoral, en la Provincia consideran que la propuesta de Kirchner es una “discusión válida”, que podría tener un consenso amplio dentro del FdT. Sin embargo, aclaran, al igual que con la suspensión, la provincia acompañará lo que en la órbita nacional se decida.